Frecuentemente en los inviernos vemos como en el nordeste de los EEUU y Canadá se dan intensas olas de frío y nevadas copiosas que dejan a unas amplias regiones de esta parte del continente norteamericano sumidas en el desconcierto, cierta histeria de la población provocada a veces por las noticias sensacionalistas de los medios de información y todo ello con una imagen de las ciudades inundadas de mantos blancos casi apocalíptica. Todos los inviernos, repito, todos, pasa algo parecido en unas cuantas ocasiones, sin embargo, aquí en Europa occidental, a una latitud similar a la región a la que nos estamos refiriendo no ocurre eso. Por poner un ejemplo, Washington a 38º53' LN y Sevilla a 37º23', con tan sólo 1º de diferencia, tienen climas totalmente diferentes, la primera (se puede observar en el climograma A) tiene una media de algo más de 12º de Tº y con unas precipitaciones de más de 1.100 l/m2 al año, y si se observan las medias de Tº de invierno que están alrededor o por debajo de 0º, se pueden entender esas nevadas. Por otra parte en el climograma B, de Sevilla, las diferencias más notables se ven en tres factores:
1.- La media de TºC, con algo más de 6º en la capital andaluza.
2.- El invierno tan suave que hay en esta ciudad. Apenas bajan de los 10ºC.
3.- El verano seco y caluroso propio de los climas mediterráneos.
Climograma A- Washington
Climograma B- Sevilla
Así pues, como apuntábamos al principio, cuáles son las causas que explican esas nevadas y olas de frío al NE de los EEUU y este de Canadá, vamos a intentar explicarlo.
En primer lugar hay que tener en cuenta la temperatura del Océano Atlántico en las costas orientales de Canadá y EEUU. Desde el Océano Glaciar Ártico, bordeando Groenlandia, desciende una corriente marina fría, muy fría, que recibe el nombre de Labrador y que baña las costas orientales de Canadá y de los EEUU. Se puede ver en la imagen C, las flechas azules representan esta corriente. Evidentemente la temperatura que lleva influye de una manera determinante en el clima de toda esta región. Al menos hasta la Península de Florida, donde la Corriente del Golfo detiene la influencia de la del Labrador.
Imagen C - Dirección de la Corriente del Labrador
En segundo lugar deberíamos hacer referencia al Anticiclón térmico de Manitoba que suele hacer su aparición en "escena" en los meses más fríos, tal y como suelen hacer los anticiclones térmicos. Como su nombre indica aparece sobre la provincia de Manitoba, en la parte central de Canadá. Su radio de acción suele ser de más de 10 millones de km2, y por lo normal es el factor que inyecta aire frío al nordeste de EEUU y este de Canadá.
Por último, en tercer lugar, la formación de una borrasca en el sureste de EEUU, en aguas más cálidas y que en muchas ocasiones su desplazamiento suele ir hacia el norte, pasando y por tanto influyendo, a las costas de las regiones que estamos hablando.
Cuando entran en acción estos tres factores, las posibilidades de nevadas y olas de frío en estas latitudes están más que garantizadas. El anticiclón que envía flujo del norte, se enfría más al pasar sobre las masas marinas frías de la corriente del Labrador y la borrasca que trae inestabilidad y aires muy húmedos y con flujos del este, hace todo lo demás. Las precipitaciones están garantizadas, el frío y descenso de las temperaturas también y, muy probablemente, el caos en algunas ciudades, carreteras, aeropuertos y demás.
Para acabar un breve comentario para despertar la curiosidad en alguno de vosotros:
La costa gallega, prototipo de clima oceánico y de tiempo templado por excelencia, está a la misma latitud que Boston. A Coruña con 43ºLN y Boston con 42ºLN, presentan climas totalmente diferentes. Fríos inviernos y además muy nivosos en Boston, mientras que A Coruña, inviernos y veranos muy suaves, nunca nieva, nunca hiela. De nuevo el porqué hay que buscarlo en las corrientes marinas: la del Labrador fría y la del Golfo cálida.
¿Podríais encontrar algunas regiones donde se puedan dar circunstancias climatológicas similares a las que hemos comentado?
Imagen satélite que muestra la última gran borrasca que azotó el noreste de EEUU y que produjo las grandes nevadas.
Así quedaron algunas de las avenidas de Nueva York tras el paso de la borrasca.¡Espectacular!